Julio Escámez, Bitácora de un Regreso
Julio Escámez, es el nombre que lleva la sala de exposiciones N°2 de la Casa del Arte. Fue renombrada para homenajear al destacado artista nacional, quien donó una parte importante de su obra a la Universidad de Concepción. Escámez, nació en Antihuala, provincia de Arauco el 15 de noviembre de 1925, es reconocido como uno de los artistas plásticos más importantes de su generación.
Comenzó sus estudios de pintura siendo aún adolescente en la Academia de Bellas Artes del pintor Adolfo Berchenko, en Concepción y fue uno de los alumnos de la Academia escogidos, como ayudante del pintor Gregorio de la Fuente cuando se pintó el mural al fresco “Historia de Concepción” en el Hall de la Estación de Ferrocarriles, entre los años 1943 a 1945. Luego continúa sus estudios en la Escuela de Bellas Artes y Escuela Artes Aplicadas de la Universidad de Chile. Su inquietud por conocer las culturas precolombinas lo llevaron a viajar por Perú y Bolivia. A su regreso en 1953, fue contratado como Profesor de Pintura Mural del Instituto de Arte de la Universidad de Concepción. En 1955 obtuvo una beca a Florencia, Italia, para estudiar la técnica de la pintura mural al fresco. Su estadía se prolongó hasta 1957. Allí estudió la pintura de los siglos XIV y XVI, especialmente de El Giotto y Piero de la Francesca. Continuó en la Academia de Arte de Düsseldorf, Alemania, donde trabajó en Artes Gráficas y Tecnología de la Pintura. Siguió otros estudios en el Kunsthistoriches Museum Viena, Austria. Viajero incansable, recorrió Rusia, China, Japón y la India, lugares a los que fue invitado y donde expuso sus obras. Tras recorrer varios países y aprender de diversos maestros a nivel internacional, llegó a la UdeC en 1956, donde se desempeñó como profesor de pintura
Por el golpe de estado en Chile huyó al exilio en 1974 y se radicó en San José de Costa Rica, donde se desempeñó como profesor de la Escuela de Artes Plásticas de la Universidad de Heredia, y asesor ad-honorem del Ministerio de Cultura para la restauración y conservación de los monumentos nacionales. En 2015 fue distinguido con el título Doctor Honoris Causa de la Universidad de Costa Rica, meses antes de fallecer a los 90 años, el 23 de diciembre ese mismo año.
Antes de su exilio en Costa Rica, donde vivió desde 1974 hasta su muerte en 2015, Julio Escámez se hizo conocido por una potente obra de contenido social, en donde denunció los conflictos de la humanidad moderna, fiel a las técnicas realistas, que empleó para recrear asuntos cotidianos de la vida popular y el paisaje latinoamericano.
“La ubicación dentro de la estructura social de mi familia, la clase media empobrecida, determinó mi visión del mundo” – Julio Escámez
La Pinacoteca, recibió una importante parte de su colección a modo de donación por parte del pintor; colección que incluye pinturas, dibujos y grabados, además de matrices de xilografías, cuadernillos, bitácoras y libros autografiados.
La historia de esta donación comenzó en 2015, cuando el artista contactó a una ex alumna de la facultad de artes plásticas, para concretarla.
“Entre las obras donadas por Escámez, está el retrato de su madre, imaginar que nos quisiera dar este bien tan preciado nos emociona” – María Soledad González, ex alumna de la carrera de Artes en la Universidad de Concepción y ex directora de Extensión y Pinacoteca.
“En el último tiempo, conversamos sobre el destino de sus obras. Estuvimos de acuerdo que esto tenía que quedar repartido en dos partes. Una en la Universidad Nacional de Costa Rica, donde se abrirá un museo y la otra en la Universidad de Concepción. Cumplí con ese anhelo que él tenía de dejar su obra acá, donde trabajó”- Orietta Escámez, hermana del artista.